En la vista plana de Google Maps del Valle de México, el lago de Texcoco aparece como un terreno baldío, claramente separado de la zona urbana —la cual se extiende como un conjunto denso de pequeños cuadrados grises al occidente— por una línea recta cortante que lo atraviesa de norte a sur. Al oriente, en cambio, el plano monocromático de aquello que queda de la antigua cuenca se degrada lentamente en secciones verdes y de color tierra, interrumpidas por pequeñas líneas que señalan caminos, fronteras o barreras geológicas: se trata de una región que redibuja constantemente sus límites. Los pueblos y ejidos del oriente se extienden en formas irregulares, a veces superpuestas, a veces salpicando la planicie del lago en intrusiones de puntos y planos minúsculos. En ocasiones, estos pueblos campesinos, que disputan su frontera con el lago de Texcoco desde hace unas décadas, no se destacan en esta versión del mapa que, por el contrario, designa algunos lugares inexistentes y señala algunos puntos geográficos ya desaparecidos: [...]
Cartografía
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