Parque

En una zona de los terrenos del lago de Texcoco se encuentra, intacta, una cancha de fútbol, cubierta de un pasto de color verde intenso hecho en nylon. La cancha permanece vacía, uniéndose a otras canchas de deportes diversos a través de caminos. Al pie de éstas se encuentran cabañas de madera, también solas y sin ocupar. Todas estas construcciones forman parte de un proyecto que se hizo urgente y polémico durante la presidencia de Felipe Calderón. El Parque Ecológico Lago de Texcoco se propuso de modo paralelo a otro proyecto: México, Ciudad Futura. Ambos proyectos insistían en la necesidad de recuperar una zona lacustre del mayoritariamente seco lago de Texcoco, mitigando un inminente impacto ambiental que la ciudad llevaba décadas resistiendo. Pequeñas variaciones diferenciaban a un proyecto del otro (las más grandes eran probablemente políticas): proponían, cada uno a su manera, un sistema de lagos e islas interconectadas que habilitarían las funciones ecológicas de un terreno protegido, a la vez dando lugar a urbanizaciones uniformes (tal vez de clase media), así como a diferentes tipos de comercios; estos proyectos instalarían en su centro, como un eje articulador del gran todo, un nuevo aeropuerto.  [...]